Ana Mato, ministra de Sanidad, pretendidamente preocupada por los efectos en la salud de la píldora del día después en jóvenes en desarrollo, ha encargado un informe médico sobre la misma a la Organización Médico Colegial, la Sociedad de Ginecología y la Agencia
de Evaluación del Medicamento. Y digo pretendidamente preocupada porque ya existen desde hace tiempo informes favorables de organizaciones científicas poco sospechosas de estar politizadas, en los que se basó el gobierno anterior para autorizar la venta de la píldora sin necesidad de receta, y que sin duda son conocidos por la ministra. En concreto, un estudio de la OMS asegura lo siguiente (la negrita es mía):
<<El uso de las PAE-LNG es seguro para todas las mujeres, incluidas las adolescentes. El levonorgestrel, el ingrediente activo en las PAELNG, ha sido usado extensamente en varias formulaciones por más de 30 años y ha sido estudiado ampliamente en mujeres en edad reproductiva. El levonorgestrel es bien tolerado, no se conoce que provoque alergias, se elimina del cuerpo en pocos días, no es adictivo y se ha demostrado que no produce reacciones tóxicas. Las PAE-LNG no presentan riesgo de sobredosis y no tienen interacciones importantes con otros medicamentos ni contraindicaciones para su uso. Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una sola dosis de levonorgestrel (1,5 mg) para uso de emergencia dentro de las 120 horas después de una relación sexual no protegida, el uso repetido no presenta riesgos conocidos para la salud. No se han reportado efectos adversos severos, ni en mujeres que han usado PAE más de una vez en un ciclo menstrual.>>
(*) Que por cierto, la píldora no puede provocar un aborto ni impedir que un óvulo fecundado se implante en el útero (como se puede ver en el informe de la OMS citado arriba). Esta es la razón por la que el periodo en el que es efectiva es tan corto y tan específico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario